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dc.contributor.authorPineda Toro, Mariana
dc.date.accessioned2014-08-01T18:41:18Z
dc.date.accessioned2018-10-01T16:53:03Z
dc.date.available2014-08-01T18:41:18Z
dc.date.available2018-10-01T16:53:03Z
dc.date.issued2012
dc.identifier.urihttps://dspace.marymount.edu.co/handle/4444/291
dc.description.abstractConstantemente hablamos de la simetría como la perfección, decimos que cuando hay simetría en una construcción, cuando hemos arreglado nuestro cuerpo teniendo en cuenta las proporciones, hemos alcanzado los ideales de belleza porque asimilamos simetría con perfección y perfección con belleza. La música es un arte, por lo tanto tiende a la belleza; pero también es ciencia y números, y como es números, las proporciones, distancias y sucesiones son fáciles de aplicar en teoría. La sucesión de Fibonacci, o media áurea, es conocida como la proporción divina y perfecta, aplicable a la música de dos maneras: de manera natural en las frecuencias y de manera racional según los grados e intervalos de la música.en_US
dc.language.isoen_USen_US
dc.publisherMedellín : Marymount Schoolen_US
dc.rightsAtribución-NoComercial-SinDerivadas 2.5 Colombia (CC BY-NC-ND 2.5)en_US
dc.rights.urihttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/co/en_US
dc.subjectMusicen_US
dc.subjectMusical Analysis, Appreciationen_US
dc.subjectMusical notationen_US
dc.titleLa música como arte imperfecto : Proyecto de Gradoen_US
dc.typeThesisen_US


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Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.5 Colombia (CC BY-NC-ND 2.5)
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